Cambiando la Forma de Observar

Tomando verdaderamente las riendas de los asuntos, teniendo en cuenta que es uno mismo el que desarrolla la vida y que uno está vivo por mucho más que la acción de sus padres, uno entiende, que todo lo que tuvo que pasar para que estemos en el lugar que estamos, es algo maravilloso y no se puede más que agradecer por un regalo tan divino, como es el vivir, y así valorar la vida como la esencia misma del vivir con gracia divina, con alegría por estar experimentando todo este mar de relaciones y disfrutando momentos increíbles. Más allá de que a veces nos parezcan amargas las experiencias, hasta del limón más fuerte se puede hacer un rico jugo, así que aprendamos de los que nos enseñan a vivir con gracia y disfrutemos de la vida como lo que es. Positivismo, buena voluntad, paz y alegría. Que esos sean los pilares que marcan el progreso diario de nuestros días y el transcurrir de la vida. Paz y Amor para todos en estos días de buena voluntad.